top of page

Cambiando


He descubierto que quedarme en un sitio tanto tiempo, puede ser un obstáculo para mi crecimiento, la vida sabe tanto de eso, o quizás sabe tanto de mi, sabe que cada cierto tiempo debe quitarme y ponerme en otro lugar, en un preciso momento.

En lo que llevo de mis 31 años y echando una mirada al pasado, hilo cabos al descubrir que así es como misteriosamente las cosas se acomodan, tengo una maestría en el dejar ir, en el poco apego a los lugares o a las cosas, la gente me pregunta ¿cómo lo hago? me parece antinatural la pregunta, porque estoy tan acostumbrada a los cambios drásticos, que para mi eso ya es muy natural en mi vida, tanto que podría parecerme obvio. Pero claro, después comprendo que no todo ocurre igual en la vida de otros, supongo que eso también es una bendición.

El enfrentarme a estos cambios ha logrado que en mi interior se fortalezca mi resiliencia y valor, porque aunque ocurran con frecuencia no quiere decir que dejan de darme miedo. Todo lo contrario, siento todo el miedo del mundo, los atravieso con miedo, vivo con el miedo largas temporadas, pero no dejo que participe, solo lo dejo SER. Porque también eso lo aprendí con el tiempo, si peleo con el miedo me agoto, le sedo mi poder, mi control y mi energía y entonces pierdo más del 50% de toda la batalla (si pudiera llamarle así, que no lo es), entonces lo dejo estar, lo dejo sentarse y que se ponga cómodo, tan cómodo que ya no le den ganas de quedarse, hasta que logra aburrirse y pronto se va.

Pues bien, hoy de nueva cuenta me siento estar entrando en un océano inmenso en plena madrugada, sin luz que me indique el camino, no hay sol, no hay luna, no hay brújula, la única brújula interior que llevo conmigo es mi corazón, estoy justo en la linea que me separa del lugar que siempre me ha mantenido a salvo pero que me queda chico y el abismo inmenso y quizás no claro del océano oscuro en plena noche. Mi pie toca ese océano, se que daré el salto, se que cuando lo haré nadare en el y estaré bien, pero toda la energía que dejo atrás requiere comprender que es momento de crecer y que no se perderá jamas, porque se viene conmigo. Que miedo nadar en la playa de noche, siempre he sentido esa sensación que hay muchas cosas en la profundidad y todas ellas salen de noche a acariciar tus piernas (tus miedos).

Entonces medito, pongo música y confió


El miedo es el indicador de que algo muy grande quieres y puedes lograr, una vez alguien me dijo, que el ser humano tiene miedo de lo poderoso que puede llegar a ser.



Así que te abrazo desde mi camino y te acompaño.


Saltemos.



130 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

Mis inicios

bottom of page